“Si alguien renunció, se va”: Petro recrimina públicamente a Gustavo Bolívar en Tibú

Durante un evento de entrega de títulos de propiedad en Tibú, Norte de Santander, el presidente Gustavo Petro interrumpió el protocolo y expresó su inconformidad con la intervención de Gustavo Bolívar, exdirector del Departamento de Prosperidad Social. Bolívar, quien había presentado su renuncia días atrás, participó en el acto, lo que generó el reclamo público del mandatario.

“Rompo el orden del día porque no me parece que sea así, Gustavo Bolívar y otros compañeros. Primero, pues, ya los que renunciaron, renunciaron, y no se puede confundir eso”, afirmó Petro, visiblemente molesto. Agregó que “persona que renuncia porque tiene una aspiración, se va, entra su reemplazo y es el que tiene que venir a hablar”, calificando la intervención de Bolívar como un problema de respeto con el Gobierno y la ciudadanía.

El evento, orientado a la entrega de títulos a familias del Catatumbo, también fue escenario para que Petro criticara la ejecución de recursos destinados a infraestructura en la región. El presidente señaló deficiencias en el Ministerio de Transporte y cuestionó la priorización de proyectos como la vía 4G Ocaña-Gamarra por encima de obras en el Catatumbo. “Mi ministra ahora me dice ‘sí es así, muy bien Petro, pero tenemos que conciliar con los concesionarios’. ¿Entonces cuándo va a haber plata para la carretera?”, preguntó.

Petro aprovechó además para referirse a los programas de sustitución de cultivos y apoyo a adultos mayores, destacando la necesidad de abordar los problemas con objetividad. Sobre la situación de orden público, defendió la declaratoria de conmoción interior en la región, argumentando que responde a los asesinatos y desplazamientos recientes.

El trasfondo político del reclamo a Bolívar se da en medio de su salida del Gobierno, que alimenta especulaciones sobre su posible candidatura presidencial en 2026. Junto a Bolívar, figuran como posibles aspirantes del oficialismo María José Pizarro, Carlos Amaya y Roy Barreras. En la misma semana, Petro sostuvo reuniones por separado con Amaya y Barreras, fortaleciendo las señales de reacomodamiento político de cara al próximo ciclo electoral.

Petro ha reiterado que no buscará la reelección, pero ha manifestado su interés en que su proyecto político continúe tras su mandato. La controversia en Tibú ilustra las tensiones al interior del Gobierno frente a las salidas de altos funcionarios con aspiraciones electorales.