Gobierno
Petro denuncia seguimiento de Estados Unidos a su familia tras decisión de comprar aviones Gripen de Suecia
El mandatario afirmó que la negociación fue “transparente” y señaló que su exclusión de la oferta de aviones F-16 de Estados Unidos habría provocado reacciones diplomáticas.
El presidente Gustavo Petro denunció que el Gobierno de Estados Unidos ha seguido a su familia luego de que Colombia optara por adquirir aviones Gripen de fabricación sueca, en lugar de los F-16 ofrecidos por Washington.
A través de su cuenta de X, el mandatario aseguró que “el tema de la rabia de funcionarios del gobierno estadounidense parece ser que no compré los F16 de tercera mano que me ofreció EE. UU., sino que me decidí por los nuevos Gripen de Suecia”.
Petro agregó que la negociación “se realizó con total transparencia” y que la ley colombiana le permite efectuar este tipo de acuerdos. “Suecia no es un país terrorista ni los dueños de Gripen son narcotraficantes”, afirmó.
El presidente también sostuvo que “nosotros somos soberanos, no estamos obligados a comprar armamento de segunda o tercera mano para nuestra fuerza pública”, y pidió al Reino de Suecia y a la empresa Saab, fabricante de los aviones Gripen, pronunciarse frente a lo que calificó como “un atentado a nuestra libertad y soberanía”.
La publicación de Petro se produjo tras un artículo de investigación de El Tiempo sobre las repercusiones internacionales de su inclusión en la llamada Lista Clinton, que bloquea el acceso de personas o entidades al sistema financiero estadounidense por presuntos vínculos con actividades ilícitas.
Según el medio, durante su reciente gira por Arabia Saudita, Catar y Egipto, al menos diez empresas se negaron a suministrar combustible al avión presidencial FAC-001, dificultando la logística de los desplazamientos.
Fuentes citadas por el diario señalaron que Washington evalúa una “segunda fase” de sanciones que incluiría a personas cercanas al mandatario y a la primera dama, Verónica Alcocer, ya mencionada en la lista.
El presidente respondió afirmando que la medida constituye una “retaliación política” por sus posiciones sobre Venezuela, Gaza y la migración, y contrató abogados estadounidenses para tramitar su exclusión del listado.
El Gobierno colombiano avanza en la fase final de adquisición de los aviones Gripen, que reemplazarán a la flota de cazas Kfir en la Fuerza Aérea. La firma del contrato está prevista para noviembre.
Petro defendió la operación señalando que la compra busca fortalecer la capacidad aérea del país bajo criterios de modernización y transparencia. “La negociación con Suecia se hizo abiertamente. Que no me obliguen a comprar entonces aviones rusos”, publicó el mandatario.