Caribe
“Colombianos Deportados” ganó el Festival del Burro 2025 en San Antero con mensaje sobre migración
Durante el Sábado de Gloria, el municipio cordobés realizó la tradicional burralgata y premió cinco propuestas de disfraces que combinaron sátira y crítica social.
Durante la Semana Santa, el municipio de San Antero, en el departamento de Córdoba, realizó la edición número 35 del Festival Nacional del Burro, una celebración cultural que ha logrado posicionarse como una de las más representativas de la región Caribe. De acuerdo con las autoridades locales, el evento registró una asistencia cercana a las 5.000 personas.
La actividad principal fue la tradicional burralgata, un desfile de burros disfrazados que recorre el casco urbano durante el Sábado de Gloria. Esta expresión comunitaria combina elementos de la sátira, la crítica social y el folclor popular. En esta ocasión, la organización entregó 26 millones de pesos en premios a los disfraces más destacados.
El primer puesto lo obtuvo la propuesta “Colombianos Deportados”, diseñada por los sananteranos Andrés Álvarez y Raldis Núñez, cuyo enfoque abordó el fenómeno de la migración y el retorno forzado de connacionales. El segundo lugar fue para “Infancias Robadas” y el tercero para “Pavo Pitero”, ambos con enfoques sociales. También se entregaron menciones especiales a otras propuestas.
La programación incluyó actividades culturales, muestras gastronómicas, conciertos gratuitos y espacios de participación ciudadana. La premiación oficial se realizó la noche anterior al desfile y contó con amplia asistencia. Al cierre del evento, las autoridades reportaron normalidad en el orden público y un balance favorable en la dinámica comercial del municipio.
El Festival Nacional del Burro tiene sus orígenes en el denominado paseo de Judas, una práctica que consiste en pasear por el pueblo a un muñeco representando al personaje bíblico sobre un burro antes de su quema simbólica. Con el tiempo, esta tradición derivó en una festividad donde el burro es reconocido como símbolo de trabajo, resistencia y vida campesina.
Además de ser un espacio de entretenimiento, el evento se ha consolidado como un escenario para la visibilización de problemáticas sociales desde una perspectiva crítica, a través del uso de disfraces como recurso narrativo. Con esta edición, San Antero fortalece su perfil como destino de turismo cultural y como epicentro de expresiones tradicionales del Caribe colombiano.
